5ta Edición

VIDA SOCIAL

Por Rocío Reyna

¿POR QUÉ SER ECOLOGISTAS?

No es necesario ser un productor ecologista para comprender la importancia de los alimentos ecológicos.

La mayoría de los consumidores se sienten más que felices de comprar productos “verdes”.  En un estudio reciente realizado por Shelton Group, el grupo descubrió que los consumidores que compran productos ecológicos, al menos ocasionalmente, lo hacen más pensando en el dinero que gastarán sabiamente que en contribuir a mejorar el medio ambiente

Un reciente estudio británico afirma que los alimentos orgánicos no son más nutritivos que los alimentos cultivados de modo tradicional. Pero esto no es lo que hace a la cuestión. Si se quiere minimizar la exposición a los pesticidas y ahorrar dinero, ya es sabido que los productos que llevan la etiqueta ecológica serán siempre más saludables. Especialmente, cuando nos referimos a frutas y a hortalizas que son las que poseen mayor cantidad de residuos de pesticidas. Algunos de estos productos son: melocotones, manzanas, pimientos dulces, apio, fresas, cerezas, col, lechuga, uvas (importadas), zanahorias y peras.

Los productos más limpios (o por lo menos, aquellos que contienen menos residuos de pesticidas) son cebollas, aguacates, maíz dulce (congelado), piñas, mangos, espárragos, arvejas (congeladas), kiwi, coles, berenjenas, papayas y sandías.

Ya sólo con pensar en los beneficios de una alimentación saludable tenemos un buen motivo para ser ecologistas.

EL AGUA

Enfermedades transmitidas por la contaminación del agua

Las enfermedades transmitidas por el agua son enfermedades producidas por agua contaminada, con desechos humanos, animales y químicos.

·        Cólera

El microbio se instala en el intestino de las personas. La principal vía de transmisión es la ingestión de agua o alimentos contaminados. El tiempo de incubación del Vibrio Cholerae oscila entre 1 y 5 días y el reservorio de dicho agente es el hombre. Los síntomas: diarrea acuosa de comienzo súbito, abundante hasta un litro por hora, diarrea con “aspecto de agua de arroz”, diarrea con olor a pescado, cólicos abdominales, nauseas y vómitos: deshidratación.

·        Fiebre Tifoidea

Causada por la Salmonela typhi. La mayoría de la gente adquiere fiebre tifoidea comiendo o bebiendo alimento o agua que a sido contaminado por gente que tiene enfermedad, incluyendo a aquellos que no tienen síntomas. Frutas crudas y vegetales, leche y crustáceos,  son los tipos de alimentos mas a menudo asociados con esta enfermedad.

Se inicia con malestar general, debilidad, perdida de apetito, dolor de cabeza y estreñimiento. Se mantiene durante unos 5 días hasta que se inicia el periodo febril con 40 grados centígrados. Se deteriora el nivel de conciencia del enfermo, estado conocido como estupor, y aparecen lesiones rojas en la piel que pueden permanecer por 14 días.

·        Paragominiasis

Lombriz que se aloja y deposita sus huevos en los pulmones humanos. Se transmiten a través de las heces fecales, y se rompen al entrar en contacto con el agua fresca. Las larvas encuentran una serpiente huésped donde se reproducen y luego se trasladan a cangrejos y otros crustáceos, los humanos la ingieren en mariscos crudos.

Provocan: enfermedad pulmonar crónica, dolor abdominal, fiebre y diarrea, desordenes visuales, daños en la espina dorsal, musculatura torácica, bazo, útero, trompas de Falopio, ovario, escroto, tracto urinario entre otras.

·        Esquistosomiasis

Infección producida por gusanos que penetran por la piel en contacto con el agua, ocasionando una urticaria en ella, para localizarse luego en las venas de diferentes órganos, principalmente el hígado o el intestino, en el caso de la esquistosomiasis intestinal o en las de la vejiga en el de la esquistosomiasis vesical donde producen reacciones inflamatorias y cicatrices. Puede causar fiebre, escalofrío, agrandamiento de ganglios linfáticos, del hígado y bazo y sangre en la orina.